ERNEST SHACKLETON
Shackleton fue protagonista de una de las grandes historias de la exploración polar. A pesar de no haber conseguido llegar jamás al Polo Sur, se convirtió en toda una leyenda tras su experiencia con el Endurance que quedó apresado por los hielos y posteriormente fue aplastado, dejando a toda su tripulación a la deriva sobre la banquisa y a los que consiguió traer de regreso y con vida tras una épica travesía que marcaría un antes y un después en este tipo de expediciones.
Recorte del periódico con el anuncio de SHACKLETON.
"Se buscan hombres para viaje peligroso, sueldo escaso, frío extremo, largos meses de completa oscuridad, peligro constante, no se asegura el regreso, honor y reconocimiento en caso de éxito".
Así rezaba el anuncio que Shackleton publicó y al que acudieron más de 5000 personas.
FICHA:
Explorador Anglo-Irlandés.
Nacido en Kilkea, Irlanda el 15 de febrero de 1874
Murió en las Georgia del Sur el 5 de enero de 1922
Tumba de Shackleton en Georgia del Sur.
EXPEDICIONES:
DISCOVERY:
viajaba como tercer oficial junto a Robert Falcon Scott. 1901-1904.
El Discovery en el canal Newmayer, Antártida
Scott y Shackleton en la popa del Discovery junto a la tripulación.
NIMROD: Barco utilizado en 1907-1909 durante una expedición a la Antártida.
ENDURANCE: Barco de la EXPEDICIÓN IMPERIAL TRANSANTÁRTICA. 1914-1917. Desapareció aplastado por los hielos.
El Endurance atrapado en el hielo.
EL QUEST: El último barco que utilizó 1921-1922. Se trataba de un pequeño ballenero Noruego reconvertido. Poco después de su llegada a Georgia del Sur Shackleton falleció en el barco a causa de un ataque al corazón.
El Quest en el Muelle de Santa Catalina, en Londres.
LA AVENTURA DEL ENDURANCE
Tras haber sido conquistado el Polo Sur por parte del Noruego Roald Amundsen, Shackleton decidió que era el momento de llegar más allá, su meta ahora consistía en lograr atravesar el Polo Sur de punta a punta.
A esta expedición se le dio el nombre de "Expedición Imperial Transantártica" (1914-1917).
Nada más comenzar la expedición, el Endurance se topó con la banquisa y quedó bloqueado por el hielo.
El Endurance zarpó de Georgia del Sur el 5 de diciembre de 1914 y tres días después ya encontraron hielo disperso.
Tras seis semanas de viaje, el 19 de enero, el barco topó con hielo duro y por fin el 14 de febrero de 1915 la temperatura descendió bruscamente de -8ºC a -28ºC. helándolo todo y dejándolos atrapados en el mar de Weddell.
Al no disponer de explosivos intentaron abrir paso con picos y palas pero tras 48 horas de agotador trabajo se dieron por vencidos.
Hubo momentos en los que la presión del hielo aflojó y se abrieron pequeñas vías de agua, pero todos los intentos por conducir al ENDURANCE hacia aguas abiertas resultaron ser un fracaso.
El 24 de octubre comenzó a entrar agua en el barco debido a las fuertes presiones causadas por los bloques de hielo y el 27, en la posición 69º 5'S, 51º 30'O. Shackleton dio la orden de abandonar la nave. El Endurance se estaba hundiendo.
Todas las provisiones y el material fueron trasladadas al campamento en el hielo.
Shackleton dijo entonces: "Hemos perdido el barco y gran parte de las provisiones, así que nos iremos a casa"
El 21 de noviembre de 1915 los restos del barco desaparecieron entre una enorme masa de bloques de hielo.
Tras tres días de dura marcha acarreando con los botes y las provisiones, aún podían ver el Endurance.
El 21 de noviembre a las 5 de la tarde, el barco completamente destrozado desapareció bajo el hielo.
La deriva los había arrastrado 2090 Km. desde que el barco quedó atrapado. Ahora esperaban que la misma deriva les llevase a tierra, sino, irían rumbo a mar abierto.
Usaron madera del barco para crear el campamento "Océano" y utilizaban la piel de pingüino y la grasa de foca como combustible para poder cocinar. Ahora cazar pingüinos y focas se convirtió en la actividad principal.
Un mes y medio después de abandonar el barco, decidieron intentar una segunda marcha hacia tierra, teniendo que arrastrar de nuevo los botes a través de bloques de hielo y montones de nieve que les llegaban hasta la cintura y estos pesaban más de una tonelada cada uno.
Tras una semana de tremendos esfuerzos Shackleton se dio por vencido.
Ahora montarían otro campamento, al que pondrían el nombre de "Campamento Paciencia", pero aquí la vida sería mucho más dura, pues dejaron atrás gran parte del material necesario. También tuvieron que matar algunos perros ya que la caza escaseaba y no había suficiente comida para todos.
Unas semanas después mataron al resto, pero esta vez se los comieron.
Mantener los botes a salvo era una de las prioridades, ya que sin ellos estarían totalmente perdidos.
Un día notaron como crujía el hielo bajo sus pies, pronto no quedaría nada debajo de ellos, así que decidieron hacerse a la mar con los botes y pusieron rumbo a la tierra más cercana.
Por las noches subían los botes a los témpanos para evitar que estos fuesen aplastado o arrastrados por las corrientes mientras dormían.
Shackleton optó por poner rumbo a la Isla Decepción.
Continuamente se vieron amenazados por la posibilidad de ser aplastados por los bloques de hielo flotantes y costaba mucho mantener el rumbo en los pequeños canales de agua. Una noche se oyó un fuerte crujido y el hielo se abrió justo debajo de las tiendas, haciendo caer al agua a uno de ellos dentro de su saco de dormir, por suerte lograron sacarlo a tiempo. Unos segundos después el hielo volvió a juntarse con una fuerza tremenda.
Estaban continuamente empapados y no paraba de llover y nevar, era una situación desesperante y a malas penas podían orientarse debido a la escasa visibilidad. El frío, el agotamiento y el hambre eran sus únicos compañeros en la noche helada sobre un profundo mar negro. Ahora no lograban encontrar hielo estable donde poder descansar y pasaban las noches en los botes, remando, empapados y con las manos congeladas. Muchos de ellos ya padecían disentería.
Los hombres estaban agotados, vencidos por la desgracia y el miedo y comenzaban a derrumbarse, fue entonces cuando Shackleton decidió cambiar de rumbo y dirigirse a la Isla Elefante y llevarlos a tierra lo antes posible.
La noche del sexto día se desató una galerna y se vieron obligados a remar y achicar agua sin parar durante toda la noche para no hundirse. Al día siguiente llegaban por fin a Isla Elefante .
Habían estado 7 días en el mar y más de 7 meses sobre hielo a la deriva.
Hacía un año y cuatro meses que no tocaban tierra.
ISLA ELEFANTE
Montaron el campamento en una franja de playa baja que no ofrecía protección alguna, así que dos días después trasladaron el campamento a una segunda base a la que llamaron "Cabo Wild" situada en el lado occidental de la isla. Esa misma noche volvió a desatarse otra galerna y pasaron una noche infernal acurrucados bajo los botes. El viento destrozó una de las tiendas y arrastró parte del material al mar. Esta ventisca duró cinco días.
Ahora el problema era que la Isla Elefante quedaba fuera de las rutas marítimas y fuera de las zonas de pesca de los balleneros o cazadores de focas, por lo que las posibilidades de rescates eran prácticamente nulas. Shackleton decidió entonces que debían ir en busca de ayuda.
Los hombres de Shackleton en Isla Elefante.
EL VIAJE DEL JAMES CAIRD
EL JAMES CAIRD
Prepararon uno de los botes para esta peligrosa travesía (el James Caird), se le añadieron dos toneladas de lastre de piedras para darle estabilidad y cargaron comida para cuatro semanas y el 22 de abril de 1916 todo estaba a punto para poder partir.
FrankWorsley sería el encargado de conducirlos hasta Georgia Del Sur, esto sería como encontrar una mota de tierra en un océano infinito.
Partieron de Isla Elefante un día soleado, con aguas tranquilas, pero al segundo día todo empeoró y tuvieron que enfrentarse a aguas más peligrosas. El agua empezó a caer a cantaros sobre el pequeño bote y la temperatura descendió hasta casi -20ºC. Nuevamente se vieron obligados a achicar y bombear agua para poder mantenerse a flote. Para dormir hacían turnos de cuatro horas y tenían que tumbarse sobre el lastre de piedras.
Tras 16 agotadores días de lucha contra el mar y los elementos, medio congelados y siempre empapados por fin llegaron a Georgia Del Sur.
Habían recorrido 1500 km en un pequeño bote en uno de los peores océanos del mundo, una hazaña que jamás se volvería a repetir.
Ahora se enfrentaba a un nuevo problema. Al acercarse a tierra se desató un viento huracanado que los dirigía directamente hacia los acantilados. El huracán sopló durante nueve horas, pero por suerte consiguieron mantenerse alejados de la costa.
La tarde del 10 de mayo consiguieron entrar en la Bahia Del Rey Haakon, en Georgia Del Sur.
LA TRAVESÍA DE GEORGIA DEL SUR
Los hombres estaban agotados y el bote se encontraba en muy malas condiciones así que ahora deberían atravesar la isla a pié, ya que la estación ballenera de Stromness se encontraba al otro lado y ellos se hallaban en la parte Sur de la isla, completamente deshabitada.
Tras un corto periodo de descanso Shackleton decidió dejar a McNish, Vincent y McCarthy en el punto de desembarco y Worsley, Crean y él irían en busca de ayuda.
Aprovechando la luna llena y el tiempo en calma, a las tres de la madrugada se pusieron en marcha.
Les esperaba un total de 51 km. por un terreno que aún permanecía en blanco en los mapas. Era un completo caos de picos y glaciares que nunca habían sido atravesados.
Tras varios intentos por cruzar las montañas, por fin lograron encontrar un lugar por donde poder bajar.
Con una niebla que les impedía toda visibilidad, decidieron descender por la ladera sentados sobre las cuerdas que transportaban, aun a riesgo de no poder frenar en caso de encontrarse con un precipicio. Por suerte, tras un rápido descenso, se encontraban en el fondo del valle sanos y salvos.
Exhaustos, Shackleton dejó dormir a sus hombres cinco minutos, pero los despertó diciéndoles que habían dormido durante media hora y que debían continuar. Sabía que de haberse quedado todos dormidos, jamás habrían despertado.
Tras 36 horas de dura marcha y con las fuerzas agotadas al límite, a las 3 de la tarde del 20 de mayo llegaron al puerto de Stromness.
El capataz de la base ballenera fue incapaz de reconocerlos, estaban famélicos, harapientos y con las caras ennegrecidas por el humo de la grasa de foca. Parecían salidos del mismísimo infierno.
EL RESCATE FINAL
Cuando Shackleton hubo explicado lo ocurrido, inmediatamente enviaron un bote en busca de los tres hombres que quedaban al otro lado de la isla, en la costa Sur.
Tres días después de llegar a Stromness, Shackleton, Worsley Y Creansalieron hacia la Isla Elefante en un barco prestado. A 60 millas de la isla su barco fue detenido por el hielo y tuvieron que volver atrás.
Durante los cuatro meses siguientes se hicieron varios intentos por llegar a la Isla Elefante. Por fin a finales de agosto el gobierno chileno les prestó un pequeño remolcador "El Yelcho" y en su cuarto intento de rescate, consiguieron llegar a la isla.
Finalmente, el 30 de agosto de 1916 los 22 hombres que quedaron a la espera, fueron rescatados.
Shackleton no consiguió llegar al Polo Sur, pero logró salvar a todos sus hombres en la que fue la mayor travesía de todos los tiempos, realizada en un pequeño bote salvavidas de apenas siete metros, en uno de los peores mares y mas salvajes del mundo.
LIBROS SOBRE SHACKLETON:
PELÍCULAS Y DOCUMENTALES:
Aquí tenéis los Links por si os apetece verlos:
Documental Atrapados en el hielo
Pelicula Shackleton, La odisea de la antartida
Casi todo en esta vida tiene un objetivo y el tuyo empieza a ser una realidad.
ResponderEliminarMe parece que estas logrando informar de manera didáctica
Así intento que sea, aunque me da tanto miedo pasarme como quedarme corto. Procuro que esté en su justa medida....y gracias por los animos.
Eliminar«Para una organización científica y geográfica conjunta dame a Scott, para un viaje invernal, Wilson, para una carrera al Polo y nada más, Amundsen, y si estoy en un maldito agujero y quiero salir, dame todo el tiempo a Shackleton». Aspley Cherry-Garrard
ResponderEliminarOhh he quedado con la boca abierta, no sabía nada de este hombre y su vida, que increíble y asombrosa, sin duda un hombre muy valiente, necesito ver los documentales, que impresionante como llevaron al límite sus vidas, el espíritu de supervivencia, wow no imagino de lo que podemos ser capaces los seres humanos en una situación así, gracias por instruirnos con este post tan completo. Saludos!
ResponderEliminarMe he quedado asombrada, que capacidad de lucha, de superación, de seguir adelate a pesar de todos los contratiempos imaginables, Shackleton consiguió lo que nadie se podía imaginar que puediera lograr, sobrevivió y salvó a sus hombres. Luchó por su supervivencia y la de sus hombres y bos ha dejado un ejemplo de superación y perseverancia.
ResponderEliminarMenuda historia... ¡pero pobres perretes! :(
ResponderEliminarNo entiendo que alguien que ha pasado tantas penalidades se vuelva a hacer a la mar, para al final acabar muriendo de un infarto cardíaco. Yo tengo claro que estaría tan traumatizado que nunca me volvería a subir a nada que vaya por mar, solamente por eso es una persona admirable. Valiente no es el que no siente miedo, valiente es el que conoce el miedo pero lo vence.
Hola, me ha encantado tu post, las expediciones aunque nadie lo crea en esas épocas siempre traían desgracias, muy triste la historia de shackleton, no se como podían soportar temperaturas a -20•c, mientras que nosotros nos quejamos por cualquier frio, yo diría que este hombre junto a su tropa fueron muy pero muy valientes, no todo el mundo que hace expediciones por mar casi lo logra, pero logro una de sus metas que fue llegar al polor sur, lastima que no pudo atravesarlo, shackleton hombre admirable. Saludos
ResponderEliminar¡Hola! Me ha gustado mucho tu entrada. No tenía ni idea de la historia de Ernest Shackleton y siempre me gusta aprender cosas nuevas. Las exploraciones siempre tenían sus partes negativas..., es una pena y una historia muy triste. Me guardo los enlaces de la película y del documental ara verlo. Muchas gracias. Saludos.
ResponderEliminarMe he quedado alucinada con lo que llegaron a sufrir en la expedición imperial transantártica. No conocía las aventuras de Ernest Shackleton y me asombra que después de todo lo vivido, de pasarse más de un año en medio de la nada y de comerse a los perros, llegase a morir por un infarto.
ResponderEliminar¡Un beso!